Lo que se anunciaba como una de las peleas más atractivas de la Spaten Fight Night en San Pablo terminó en un bochorno monumental. La esperada contienda entre la leyenda del boxeo brasileño Acelino “Popó” Freitas y el histórico campeón de MMA Wanderlei “Cachorro Louco” Silva debió interrumpirse de manera abrupta tras un desenlace escandaloso.

El combate se desvirtuó cuando Silva, de 48 años, no logró adaptarse al reglamento del boxeo y lanzó repetidos golpes ilegales. Pese a las advertencias del árbitro y al descuento de puntos en distintas ocasiones, insistió con esas acciones hasta provocar su descalificación inmediata.

El caos en el ring

La reacción del equipo de Silva fue furiosa. La protesta derivó en un enfrentamiento campal entre las esquinas, con empujones, trompadas y hasta patadas. En medio del tumulto, el propio Silva recibió un golpe que lo dejó noqueado, aumentando la tensión en un estadio desbordado.

La seguridad y las autoridades tuvieron que intervenir para calmar la situación. Según la transmisión de TV Globo, Silva fue asistido por los médicos luego del caos.

El triunfo de Popó

Pese a la interrupción, el resultado oficial declaró como ganador a Popó Freitas, multicampeón mundial de boxeo con un récord de 41 victorias (34 por nocaut) y apenas 2 derrotas. El exsuperpluma y ligero celebró con su público, aunque su triunfo quedó opacado por el escándalo.

Del otro lado, Silva firmó un debut en boxeo para el olvido. Con pasado glorioso en PRIDE y también en la UFC, su último triunfo en MMA se remonta a 2013. Lo que debía ser una exhibición histórica terminó en un espectáculo marcado por la violencia y el descontrol.